El término puja (pūyā) proviene del sánscrito y podría traducirse como "ritual". En el Camino del Gong hace referencia a una Ceremonia Sagrada de Sanación en la cual se mantiene el sonido de los gongs durante siete horas y media sin interrupción y a un volumen moderado. Esta transformadora sesión de total inmersión en el sonido holístico y primordial del Gong fue creada por el Gran Maestro Don Conreaux a partir de las enseñanzas de su Maestro Yogui Bhajan, y equivaldría en duración a unas 10 sesiones de gongs de 45 minutos cada una aproximadamente (450 minutos).
Cuenta Baba Don que en 1972, durante su segundo año como director fundador del ashram Nanak Dwara en Phoenix (Arizona), su Maestro le pidió que cuidara de su hijo mayor Rambir, el cual no hablaba palabra alguna desde que era un niño pequeño. Don le dio una inmersión completa de gong durante 45 minutos, y a partir de ese momento, Rambir no dejaría nunca de hablar, transformado por la experiencia. Yogui Bhajan le reveló en ese momento que un mínimo de diez sesiones seguidas y completas de gong podría tener un efecto sanador increíble.
Dado que distribuir esa cantidad en diez inmersiones seguidas (a razón de una sesión de 45 minutos por día) era algo poco práctico para la mayoría de las personas, Don Conreaux tuvo la idea de unificar todas esas sesiones en una única noche, y así fue como surgió la puja de gongs estándard tal y como hoy la conocemos. La duración de la puja, especialmente en las largas noches invernales, puede extenderse hasta abarcar un máximo de 12 sesiones de gong, lo cual equivaldría a unas 9 horas (540 minutos). En ambos casos (4+5+0 / 5+4+0), además, el resultado da 9, considerado como el número de la consciencia cósmica. En otras palabras, el número del Gong.
Además de la duración de la sesión, otra importante diferencia entre el baño y la puja de gongs tiene que ver con la intensidad con la que se hacen sonar los gongs durante la ceremonia. Mientras que en el baño de gongs de 45 minutos el sonido debe alcanzar el clímax necesario para poder "desmaterializar la consciencia mundana", en la puja el volumen debe mantenerse a un nivel homogéneo y moderado a fin de permitir que el cuerpo pueda absorber las frecuencias transmutadoras del gong sin que éstas lleguen a alterar el estado de sueño y suspensión del ego en el que se encuentran las personas que las están recibiendo.
La puja de gongs, por lo tanto, se realiza aprovechando el ciclo nocturno del sueño, de manera que los asistentes suelen acostarse y dormir durante la misma, en una posición receptiva a los sonidos sanadores de los gongs, si bien también es posible adoptar una postura meditativa. En cualquier caso, es importante tener en cuenta que, aunque el cuerpo físico se quede dormido, la consciencia se mantendrá despierta durante toda la ceremonia. Es en este estado de ensoñación consciente, entre la vigilia y el sueño, en donde se puede acceder a los niveles más profundos y subconscientes de nuestra mente. Desde esta sutil receptividad, los asistentes podrán recibir revelaciones que les ayudarán a expandir la consciencia, despertar la intuición, reconocer su verdadero propósito en la vida y conectar con su verdadera Esencia inmortal.
Durante la noche, la expansiva interacción de todos los gongs sonando al unísono va tejiendo una envolvente e infinita plétora de tonos armónicos que inciden directamente en todos y cada uno de nuestros cuerpos, desde el físico hasta los más sutiles. Como resultado, los asistentes podrán experimentar un estado de profunda relajación, mientras el sonido va equilibrando y regenerando nuestro sistema nervioso y glandular, reduciendo las tensiones, armonizando nuestro cuerpo emocional, estimulando la circulación, deshaciendo los pensamientos limitantes que nos bloquean y facilitando la autosanación natural y el autorejuvenecimiento.
La ceremonia, que dura hasta la salida del Sol, suele introducirse con el sonido de algunos otros instrumentos sagrados (caracolas, cuencos alquímicos, cuencos tibetanos, cuencos de cuarzo, shruti box...). Los asistentes meditarán juntos y compartirán una Intención para la misma, ya sea la llegada de la Paz Mundial, la Unión de Todos los Seres, el Despertar de Nuestra Consciencia o la Apertura al Amor Incondicional. Los beneficios de la puja van dedicados a Todos los Seres de nuestra Madre Gaia, pudiendo además ir también dirigidos a alguna persona o propósito en particular.
La evolución natural de esta ceremonia, denominada "puja circular", fue promovida por el Maestro Diego Montenegro, y bendecida por el mismísimo Baba Don durante la luna llena de mayo del año 2016, en Andorra. La particularidad de este tipo de puja es que ofrece a todos los asistentes, sean o no Maestros de Gong, la posibilidad de tocar los gongs por turnos establecidos previamente, promoviendo así la Igualdad, la Hermandad y la Unidad entre todos los participantes. En otras palabras, todos somos UNO. Por supuesto, aquellas personas que no han tenido una experiencia previa con estos instrumentos recibirán antes un pequeño entrenamiento con el fin de garantizar que la puja pueda transcurrir de forma fluida y armoniosa.
Los efectos de una puja de gongs durarán en nuestros cuerpos durante varios días, mientras que el trabajo energético realizado se mantendrá durante todo el ciclo lunar (es decir, 28 días). Es importante tener presente el poderoso influjo que tiene la luna sobre nosotros. Celebrar una puja durante una noche de luna llena, cuando su prístina energía yin se encuentra en su máximo apogeo, potenciará la magia y, muy posiblemente, influirá en los efectos experimentados por los asistentes a la misma. En este momento de acelerada ascensión planetaria en el que nos encontramos, a las puertas de un significativo salto cuántico que propulsará a la Humanidad a una nueva y relevante etapa en su ciclo evolutivo, la puja de gongs constituye una de las más poderosas y transformadoras experiencias con el Sonido a la que podamos tener acceso, preparándonos para el anclaje del Rayo Verde de la Sanación y la celebración del primer Día de Paz Mundial en la Tierra en el año 2025.
¿Qué traer a una puja de gongs?: esterilla, saco de dormir y/o colchón hinchable, mantas, ropa cómoda, una botella de agua y algún objeto personal (por ejemplo un cristal) para cargarlo de energía. Es importante cenar ligero antes de la puja, no tomar nada de alcohol, y a ser posible definir la intención personal (¿hay algo que desees sanar?) antes del comienzo de la ceremonia. Namaste.
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