El pasado mes de abril la Orquesta Lemuriana de Cuencos Cantores volvió a esparcir su Luz en nuestra ciudad, esta vez en la Biotienda de Sevilla. En esta ocasión, los cuencos alquímicos de Crystal Tones tuvieron un protagonismo aún mayor (casi absoluto, en realidad), ya que la "familia" había crecido exponencialmente desde su presentación, meses atrás, en Espacio 800. Así pues, este evento supuso, realmente, el estreno de esta gran Orquesta de Luz Cristalina en Sevilla, brindándome además la oportunidad de poder dirigirla, y deleitarme en su Música Divina, por primera vez desde que estos quince cuencos llegaran a mi vida. La verdad es que mentiría si dijera que no estaba algo abrumado e inquieto al empezar.
Personalmente considero que cada concierto es una oportunidad, y un paso, hacia la automaestría. Cuando se trabaja con Seres tan avanzados como estos cuencos, es inevitable que se vayan produciendo cambios acelerados en nuestro nivel de consciencia y vibración. Considero que el Arte de tocar los cuencos es la forma más sublime de Alquimia, ya que permite destilar tonos de una pureza prístina que, literalmente, nos bañan en su Luz inmaculada. ¡Es importante estar receptivo y no dejar que el ego interfiera en el proceso! Cuando nos abrimos al Gran Misterio de estos Sonidos Primordiales y permitimos que fluyan a través de nosotros y nos guíen desde un estado de neutralidad y Presencia, estos nos van revelando sus más bellos Secretos. Secretos de una Armonía que se manifiesta cuando trascendemos la dualidad y retornamos al Origen.
Por ese motivo, nuestra evolución como intérpretes de cuencos es, al mismo tiempo, una evolución interna. El único camino posible es el de la Escucha profunda y receptiva, un Arte en sí mismo que debemos cultivar constantemente. Los cuencos cantores no sólo son capaces de emitir tonos de elevada frecuencia, sino que, además, al sostenerlos en el Tiempo, nos permiten entretejer varios tonos simultáneamente, creando acordes e intervalos de resonancia holística que, literalmente, son capaces de alterar nuestra percepción del Tiempo y del Espacio y llevarnos a una profunda comprensión de lo que Somos Realmente. Según nuestro nivel de consciencia y apertura a estos Sonidos, podemos ir, cada vez más, sutilizando nuestra técnica y nuestro lenguaje, llevando a las personas que acuden a estos "conciertos" a un estado muy profundo de conexión con el Ser al que no nos resulta tan fácil acceder normalmente.
Por estos motivos, considero que cada concierto es diferente y, a la vez, una preparación para el siguiente. Es un camino, como mencioné anteriormente, de automaestría, y en ese camino me siento como alguien que no ha hecho más que empezar a recorrerlo todavía. Reconozco que soy muy privilegiado de poder contar con estos "Compañeros de Viaje", ya que sé que mi Camino personal está ligado a ellos. Honro el día en el que llegaron a mi Vida y agradezco cada instante que comparto con Ellos, ya que estoy convencido de que, como Formas Cristalizadas de Consciencia de elevada Vibración, son Guías que me conducirán a una mayor comprensión de Mí mismo, puliendo todas mis asperezas. Y, poco a poco, concierto tras concierto, llegará el momento en el que ya no serán los cuencos los que resuenen a través de mí, sino mi Corazón unificado el que lo haga plenamente a través de ellos, fundidos en Unidad de regreso al Hogar, que no es otra cosa sino la misma Fuente de la que Procede el Sonido y, a través suyo, la Vida.
Me llena de júbilo poder compartir con vosotros algunas imágenes del concierto, además de un video con una selección de algunos hermosos momentos de "conexión" experimentados durante el mismo. Sirva este vídeo de reconocimiento a la infinita belleza de los tonos iridiscentes de esta Orquesta Alquímica, integrada por los siguientes cuencos: citrino, cuarzo ahumado, hierro (Buda que Ríe), aura rosa, indium, oro oceánico, roca de Sedona, platino, madreperla, amatista, esmeralda, Gran Padre Divino (una alquimia de Quinta Dimensión de cuarzo ahumado, oro blanco, diamante, rubí, plata y cianita), yagna, cuarzo rosa y azul egipcio. Se recomienda escuchar con auriculares. Namaste.
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